El PP de Paterna confirmó ayer la polémica llegada del nuevo jefe de la Policía Local. A partir del uno de mayo, Leopoldo Bonías asumirá la plaza vacante de intendente general y lo hará entre un mar de críticas por parte de algunos sindicatos y la oposición.
El Ayuntamiento aprobó ayer, en comisión de gobierno, la anunciada llegada de este responsable que desarrollará su labor en Paterna en comisión de servicios, durante los dos próximos años. «Se le ha concedido finalmente el traslado de Valencia a Paterna y ocupará su puesto en el mes de mayo», confirmaron ayer fuentes municipales.
El Consistorio pretende abrir una investigación para esclarecer el asunto del consumo del alcohol, ya que desde el equipo de gobierno se considera que «no debe consumirse alcohol portando un arma reglamentaria o conduciendo un coche patrulla. Sin entrar a analizar el reglamento, no ofrece buena imagen y consideramos que no debe hacerse».
En este particular escenario, el ejecutivo paternero defendía hace unos días la incorporación de un intendente general que «refuerce la labor de exigencia en el servicio al ciudadano» y aseveraba que Bonías «es perfecto conocedor de la realidad del municipio de Paterna y de su Policía Local».
También se valoraba la «experiencia acumulada en el pasado por el señor Bonías en Paterna. Llegó al municipio bajo el mandato socialista y fue ascendido a máximo responsable de la Policía Local de Paterna siendo alcalde Enrique Bargues, cargo que mantuvo con José Romero y Francisco Borruey, hasta su marcha a la ciudad de Valencia».
Fuentes municipales aseveraron ayer, tras la confirmación de la llegada del nuevo responsable policial, que el objetivo es «reforzar e incrementar la exigencia en el cuerpo», contando «como se ha hecho hasta ahora con el actual intendente principal jefe de la Policía Local de Paterna, José María González Gallardo».
Ayer también se aprobó la disposición presupuestaria necesaria para «cubrir esta plaza en comisión de servicios».