Las comunidades de vecinos de dos fincas de la calle Santísimo Cristo de la Fe de Paterna aseguran estar viviendo un «verdadero calvario» en sus viviendas. A pesar de que los edificios en los que viven son de nueva construcción, han tenido que prescindir de muchos servicios como la luz en los garajes o los servicios de limpieza, ya que la Sociedad Urbanística Municipal de Paterna (Sumpa), actualmente en concurso de acreedores, les debe a ambas comunidades «cerca de 100.000 euros», según afirman.
Sumpa adeuda a la comunidad de uno de los edificios 69.800 euros en concepto de cuotas de comunidad, que se destinan a recibos de luz, agua, revisión de ascensores, y gastos ordinarios. La situación comenzó en enero del 2012, cuando la empresa empezó a no pagar los recibos por los inmuebles de su propiedad al constituirse la comunidad, ya que, según explica José Bailén, vecino de la finca, «en la actualidad el 72% de los pisos del edificio son suyos, porque tienen 60 viviendas». A partir de esta fecha, la comunidad de vecinos explica que no se han hecho cargo de «ningún recibo».
«Para que se hiciera efectivo el cobro del dinero, al final nos tocó recurrir a la vía judicial para reclamarlos, y en mayo del 2013 ganamos una sentencia por la cual se les obliga a pagar la cantidad de 39.000 euros», asegura Bailén, «la cual obviamente no han procedido a pagar y, desde esa fecha hasta ahora, el montante total es de 69.800 euros».
Los afectados comentan que esta situación ha provocado que tengan que prescindir de servicios básicos como el de la limpieza o el de la jardinería. «Este mes hemos tenido que cortar la luz de los garajes porque no podemos hacer frente a los pagos de facturas, pese a que en varias ocasiones hemos tenido que incrementar las cuotas ordinarias y realizar alguna que otra extraordinaria», añaden desde la finca. Además, informan de que, según cálculos del administrador, «en dos meses habrá que cortar el servicio de ascensores».
Además de éstos servicios básicos, la comunidad de vecinos asegura que hay muchos otros que nunca han podido tener «por falta de liquidez». «Las placas solares para el agua sanitaria nunca se pusieron en marcha pese a que se le requirió a Sumpa varias veces por ello. Además, el grupo electrógeno, que es un grupo auxiliar de respaldo para cuando hay fallo en el suministro de luz tampoco se llegó nunca a poner en marcha», aseveraron.
lasprovincias
Sumpa adeuda a la comunidad de uno de los edificios 69.800 euros en concepto de cuotas de comunidad, que se destinan a recibos de luz, agua, revisión de ascensores, y gastos ordinarios. La situación comenzó en enero del 2012, cuando la empresa empezó a no pagar los recibos por los inmuebles de su propiedad al constituirse la comunidad, ya que, según explica José Bailén, vecino de la finca, «en la actualidad el 72% de los pisos del edificio son suyos, porque tienen 60 viviendas». A partir de esta fecha, la comunidad de vecinos explica que no se han hecho cargo de «ningún recibo».
«Para que se hiciera efectivo el cobro del dinero, al final nos tocó recurrir a la vía judicial para reclamarlos, y en mayo del 2013 ganamos una sentencia por la cual se les obliga a pagar la cantidad de 39.000 euros», asegura Bailén, «la cual obviamente no han procedido a pagar y, desde esa fecha hasta ahora, el montante total es de 69.800 euros».
Los afectados comentan que esta situación ha provocado que tengan que prescindir de servicios básicos como el de la limpieza o el de la jardinería. «Este mes hemos tenido que cortar la luz de los garajes porque no podemos hacer frente a los pagos de facturas, pese a que en varias ocasiones hemos tenido que incrementar las cuotas ordinarias y realizar alguna que otra extraordinaria», añaden desde la finca. Además, informan de que, según cálculos del administrador, «en dos meses habrá que cortar el servicio de ascensores».
Además de éstos servicios básicos, la comunidad de vecinos asegura que hay muchos otros que nunca han podido tener «por falta de liquidez». «Las placas solares para el agua sanitaria nunca se pusieron en marcha pese a que se le requirió a Sumpa varias veces por ello. Además, el grupo electrógeno, que es un grupo auxiliar de respaldo para cuando hay fallo en el suministro de luz tampoco se llegó nunca a poner en marcha», aseveraron.
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