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| intervención en otro municipio |
Agentes de Policía Local que, vestidos de paisano, patrullan Paterna (Valencia) desde el pasado mes de mayo han recogido en este tiempo 30 denuncias por comportamiento "incívico", relacionadas con la actitud de los propietarios de animales domésticos, según ha informado este cuerpo policial en un comunicado.
Esta medida se puso en práctica a instancias de las Asociaciones de Vecinos, para tratar de mejorar la convivencia y el respeto entre los vecinos. Los agentes de paisano tienen "mayor facilidad" para realizar este tipo de vigilancias y denuncias, ya que los propietarios de animales son "más cautelosos" con el comportamiento de sus mascotas cuando perciben la presencia de un agente patrullando.
Las amonestaciones que se han realizado en estos meses, gracias a estos controles para corregir conductas incívicas, recogen ocho denuncias por no llevar a la mascota debidamente atada, diez por pasear a un animal catalogado como peligroso sin bozal, cuatro por carecer de la identificación homologada de la mascota y otras tres denuncias por no tener licencia para portar a un animal peligroso. Además, cinco de estas denuncias se han realizado por no recoger las deyecciones del animal en la vía pública.
Precisamente, este último motivo es el que llevó a asociaciones vecinales y particulares a demandar a la Policía Local los servicios de vigilancia de conductas incívicas con animales. La Policía Local de Paterna está autorizada a no hacer uso del uniforme reglamentario durante la vigilancia de posibles infracciones que se comentan en la vía pública, un logro que ha sido "difícil de conseguir" pero que aseguran que es "imprescindible" desde la Policía Local para poder "atender correctamente la preocupación de los vecinos respecto a este tema".
750 EUROS POR NO RECOGER EXCREMENTOS
Las obligaciones de los propietarios de animales domésticos pasan por inscribir, de manera gratuita, al animal en el registro municipal, dotarle de una cartilla de vacunación y de un chip de identificación, además de encargarse de la limpieza de las defecaciones que producen con el fin de mantener el pueblo en condiciones salubres y seguras.
La no recogida de excrementos puede suponer para el infractor una sanción de hasta 750 euros. Además, todos los propietarios deben llevar a su mascota debidamente atada. También se hace especial hincapié a la identificación de aquellas mascotas que pertenezcan a razas catalogadas como peligrosas.
lavanguardia
Esta medida se puso en práctica a instancias de las Asociaciones de Vecinos, para tratar de mejorar la convivencia y el respeto entre los vecinos. Los agentes de paisano tienen "mayor facilidad" para realizar este tipo de vigilancias y denuncias, ya que los propietarios de animales son "más cautelosos" con el comportamiento de sus mascotas cuando perciben la presencia de un agente patrullando.
Las amonestaciones que se han realizado en estos meses, gracias a estos controles para corregir conductas incívicas, recogen ocho denuncias por no llevar a la mascota debidamente atada, diez por pasear a un animal catalogado como peligroso sin bozal, cuatro por carecer de la identificación homologada de la mascota y otras tres denuncias por no tener licencia para portar a un animal peligroso. Además, cinco de estas denuncias se han realizado por no recoger las deyecciones del animal en la vía pública.
Precisamente, este último motivo es el que llevó a asociaciones vecinales y particulares a demandar a la Policía Local los servicios de vigilancia de conductas incívicas con animales. La Policía Local de Paterna está autorizada a no hacer uso del uniforme reglamentario durante la vigilancia de posibles infracciones que se comentan en la vía pública, un logro que ha sido "difícil de conseguir" pero que aseguran que es "imprescindible" desde la Policía Local para poder "atender correctamente la preocupación de los vecinos respecto a este tema".
750 EUROS POR NO RECOGER EXCREMENTOS
Las obligaciones de los propietarios de animales domésticos pasan por inscribir, de manera gratuita, al animal en el registro municipal, dotarle de una cartilla de vacunación y de un chip de identificación, además de encargarse de la limpieza de las defecaciones que producen con el fin de mantener el pueblo en condiciones salubres y seguras.
La no recogida de excrementos puede suponer para el infractor una sanción de hasta 750 euros. Además, todos los propietarios deben llevar a su mascota debidamente atada. También se hace especial hincapié a la identificación de aquellas mascotas que pertenezcan a razas catalogadas como peligrosas.
lavanguardia
