domingo, 2 de febrero de 2014

La recuperación asoma, el empleo se retrasa

El optimismo de los empresarios sobre el potencial de la economía española está en su nivel más alto de los últimos siete años. Tras una segunda mitad de 2013 mejor de lo que muchos habían pronosticado, los directivos están convencidos de que 2014 será el año de la recuperación tras una larga travesía por el desierto.
 
La opinión más extendida es que el curso actual traerá un crecimiento del producto interior bruto (PIB) y que este se trasladará a las cuentas de resultados con mejoras de la facturación y la rentabilidad de las compañías. El indicador que presentará una recuperación más tardía (no antes de 2015) será el empleo.
 
A pesar de que las empresas confían en incrementar este curso sus beneficios, sus políticas de recursos humanos seguirán siendo conservadoras. La mayoría apuesta por mantener la plantilla y en aquellos casos donde se aumente el número de trabajadores se hará fundamentalmente a través de contratos temporales.

Son las principales conclusiones del Barómetro de Empresas de EL PAÍS, correspondiente al segundo semestre de 2013. Una encuesta que elabora Deloitte sobre una muestra de 329 empresas —récord desde que en 1999 se empezara a realizar este estudio— con sede en España y de todos los sectores de actividad, cuya facturación conjunta supera el billón de euros y emplea a más de un millón de personas, aunque en su mayoría no cotizan en Bolsa.