La gestión de los residuos realizada por el Partido Popular en Valencia y su área metropolitana obligará a subir la tasa que pagan los ciudadanos entre un 40 y un 60%, según aseguraron ayer fuentes de la Entidad Metropolitana de Residuos (Emtre).
Su presidente intenta retrasar el traslado de los costes reales de la basura al bolsillo de los ciudadanos para no asumir el desgaste político que supondría. Sin embargo, su situación, según las fuentes, es cada vez más delicada. "Nos dice que está esperando una respuesta de la Generalitat a los problemas económicos del organismo, como si Camps estuviera en condiciones de repartir algo más que planes", explicó un representante del PSPV en el citado organismo.
El coste de la gestión de la basura que soportan los ayuntamientos del área metropolitana ha pasado de 35 euros por tonelada en 2003 a 59,2 en 2008 mientras el coste de las instalaciones que supuestamente iban a solucionar los problemas de la basura en Valencia se disparaba al pasar de los 68 millones de las primeras adjudicaciones en 2004 a algo más de 160 millones en la actualidad.
La Mancomunitat de l'Horta Sud ha aprobado una moción con el apoyo del grupo socialista y la abstención del Partido Popular en la que critica la política de gestión de residuos de la Generalitat Valenciana y la Emtre, los sobrecostes e las plantas, así como los retrasos.
Comentario, precisamente Compromís per Paterna ha presentado una moción al pleno para que todos los gastos de eliminación de las basuras sean pagados al EMTRE directamente por el Ayuntamiento, tal y como se hacía antes. De esta manera los ciudadanos no la pagarán anticipadamente, como ahora, en el recibo del agua para temer que solicitar una subvención que luego tarda en llegar. Parece ser que la propuesta ha sido consensuada por PP y PSPV.
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