El Instituto Valenciano de Vivienda (Ivvsa) ha pasado al cobro la segunda mensualidad del recibo del IBI (impuesto de bienes inmuebles) a los residentes en las viviendas de alquiler de Valencia, a pesar de la suspensión del cobro anunciada por la consellera Isabel Bonig a mediados de julio. No se trata de un error.
Desde la Conselleria de Territorio, de quien depende el Ivvsa que ahora está integrado en la empresa pública EIGE (Entidad de Infraestructuras de la Generalitat) aseguran ahora que el aplazamiento del cobro del IBI "sólo se aplica a las viviendas que forman parte del patrimonio público de la Generalitat". Se trata del parque público de viviendas que se alquila a personas con escasos recursos y que abonan cantidades, muchas veces simbólicas, para poder vivir en este tipo de pisos.
A estas familias se les reclamó el pago del recibo del IBI aunque, tras las protestas de vecinos de Picassent o Paterna, y las quejas formuladas desde varios municipios e, incluso, la Federación valenciana de municipios y provincias (FVMP), la consellera de territorio, Isabel Bonig, decidió suspender el cobro del IBI a las familias con alquileres sociales, para no agravar su situación. "Se ha dejado en suspenso hasta tomar una decisión. Hasta septiembre este tema está en estudio", aseguró una responsable del Ivvsa a Levante-EMV el pasado 31 de julio.
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