Los hosteleros muestran su indignación y asombro por la paella de la falla municipal
"Ningún profesional incluiría ´botifarra´, longaniza y champiñones", dice el coordinador del concurso de Sueca
«A mí me había parecido una pizza». Con frases como esta es fácil entender la reacción que ha causado la paella que aparece en el remate final de la falla municipal entre los profesionales de la hostelería valenciana. La indignación y el asombro se recorre el sector, que no entiende cómo un elemento tan característico de la cultura valenciana se ha visto tan mal tratado en la falla de la plaza del Ayuntamiento.
«Ningún profesional haría nunca una paella así (con «botifarra», longaniza, bogavante y champiñones, entre otros ingredientes)», explicó a Levante-EMV el que lleva 28 años coordinando el Concurso Internacional de Paella Valenciana de Sueca, Jesús Melero. El restaurador señaló que justo en 2013 se celebra el Año Internacional de la Paella, impulsado por Paco Alonso.
«Algo tan importante como este plato se debería cuidar mucho más. La paella sí que es una imagen buena que se exporta al extranjero. Fuera de nuestras fronteras es importantísima. El año pasado concursó gente hasta de Nueva Zelanda», dijo Melero.
En la misma línea se expresó Vicente Bonillo, del restaurante El Rossinyol, de Nàquera. Tres veces ganador del prestigioso concurso de la capital de la Ribera Baixa, el cocinero recurrió al lema de «todas las paellas llevan arroz, pero no todo lo que lleva arroz es paella».
Desde 1961 unificando la receta
Melero explicó que desde principios de los años sesenta, en concreto desde 1961, el concurso que se celebra en Sueca intenta unificar la «receta típica» de la «verdadera» paella valenciana. «Desde de que coordino el concurso siempre se ha hecho de pollo y conejo de corral y el resto de verduras también de la tierra. Y esta es la misma receta que usaba cuando inició», indicó Jesús Melero.
Levante
«Algo tan importante como este plato se debería cuidar mucho más. La paella sí que es una imagen buena que se exporta al extranjero. Fuera de nuestras fronteras es importantísima. El año pasado concursó gente hasta de Nueva Zelanda», dijo Melero.
En la misma línea se expresó Vicente Bonillo, del restaurante El Rossinyol, de Nàquera. Tres veces ganador del prestigioso concurso de la capital de la Ribera Baixa, el cocinero recurrió al lema de «todas las paellas llevan arroz, pero no todo lo que lleva arroz es paella».
Desde 1961 unificando la receta
Melero explicó que desde principios de los años sesenta, en concreto desde 1961, el concurso que se celebra en Sueca intenta unificar la «receta típica» de la «verdadera» paella valenciana. «Desde de que coordino el concurso siempre se ha hecho de pollo y conejo de corral y el resto de verduras también de la tierra. Y esta es la misma receta que usaba cuando inició», indicó Jesús Melero.
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