Profanado el nuevo monolito a los fusilados

Por segundo año consecutivo, el Ateneo Republicano de Paterna ha organizado la visita cultural guiada por lugares de la ciudad más significativos relacionados con la República y con el periodo de 1936-1939.

De la información transmitida hemos recogido unas reseñas que pueden ser útiles para situarnos en aquella época. El actual C.P. Miguel de Cervantes, se llamó Blasco Ibáñez como reconocimiento de la República
al insigne escritor valenciano. Algo parecido ocurrió con el de Santa Teresa, que anteriormente tuvo el nombre de María Blasco, mujer luchadora que protegía a trabajadoras y trabajadores de la Malvarrosa.

El actual Ayuntamiento se utilizó en el periodo de guerra para custodiar presos conspiradores contra la República, también se utilizó como almacén de alimentos para la población; en este edificio estuvo la sede de la C.N.T.; la presencia de otros partidos políticos se sitúan: en la c/ Maestro Canós, el PSOE tenía una cooperativa-economato y un horno de pan que fue confiscado por los franquistas, lo mismo le ocurrió a Izquierda Republicana con la sede que tenía en propiedad en el solar situado en La Replaceta.

Paterna, aunque no llegó a ser bombardeada por la aviación italiana, si procuró proteger a la población construyendo a pico y pala refugios en distintos lugares de la ciudad, quienes los conocieron los sitúan: en el patio de CP de Cervantes, Santa Teresa Conde Montornés, c/ San Salvador, inicio de la Avd. de Europa.

En el cementerio de Paterna hemos visto con indignación que han desaparecido, del memorial recientemente inaugurado, la bandera republicana en él representada y la franja de cuatro barras situada sobre esta emblemática obra. Como Ateneo Republicano reprobamos enérgicamente este acto vandálico y provocador, y exigimos al gobierno local que abra una investigación para esclarecer lo ocurrido y perseguir a los autores de este atentado contra la dignidad de las personas asesinadas y que se adopten las medidas necesarias para evitar actos odiosos y miserables como el acontecido.