La Conselleria de Sanidad ha ordenado el cierre de la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del Hopital Arnau de Vilanova, que atiende a 325.000 habitantes de Paterna, Burjasot, Bétera, San Antonio de Benagéber, La Pobla de Vallbona, L’Eliana y Llíria, para desinfectarla entre hoy y mañana tras descubrirse un agente patógeno, según fuentes de la conselleria.
Este hecho, según fuentes de la conselleria de Sanitat, también ha provocado el desalojo de los pacientes que están ingresados en esa zona del hospital.
CC.OO. ha denunciado que este es el segundo cierre en 15 días que se produce en esta unidad y lo ha atribuido “a la obsolescencia de las instalaciones”, según un comunicado de la formación sindical.
Para Sanidad, que confirma los dos cierres, se deben al proceso de limpieza porque en el último control se detectó que el mentado agente seguía activo
Los enfermos ingresados en la UCI han tenido que ser ubicados en el área de reanimación o en otros centros hospitalarios cercanos con lo que, durante unos días, el hospital ha carecido de un servicio imprescindible, según el sindicato.
El sindicato ha criticado también “la irresponsabilidad de los responsables sanitarios que han permitido la paralización de las obras de ampliación del servicio, que son vitales para el funcionamiento del hospital y para la atención sanitaria.
Las obras de ampliación del hospital, donde figuraba crear una nueva UCI que sustituyera a la actual, están adjudicadas desde el 2009, por 1,8 millones; se iniciaron en marzo de 2010, pero no han finalizado. Los trabajos comenzaron sin la preceptiva licencia municipal que se concedió a posteriori.
Hortanoticias
CC.OO. ha denunciado que este es el segundo cierre en 15 días que se produce en esta unidad y lo ha atribuido “a la obsolescencia de las instalaciones”, según un comunicado de la formación sindical.
Para Sanidad, que confirma los dos cierres, se deben al proceso de limpieza porque en el último control se detectó que el mentado agente seguía activo
Los enfermos ingresados en la UCI han tenido que ser ubicados en el área de reanimación o en otros centros hospitalarios cercanos con lo que, durante unos días, el hospital ha carecido de un servicio imprescindible, según el sindicato.
El sindicato ha criticado también “la irresponsabilidad de los responsables sanitarios que han permitido la paralización de las obras de ampliación del servicio, que son vitales para el funcionamiento del hospital y para la atención sanitaria.
Las obras de ampliación del hospital, donde figuraba crear una nueva UCI que sustituyera a la actual, están adjudicadas desde el 2009, por 1,8 millones; se iniciaron en marzo de 2010, pero no han finalizado. Los trabajos comenzaron sin la preceptiva licencia municipal que se concedió a posteriori.
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