Al cambiar de hogar iban creando una red de intercambio de mujeres que ayudaba a reducir la consanguineidad y garantizaba la diversidad de genes.
Los individuos estudiados, descubiertos en 1994 en la cueva de El Sidrón, en Piloña (Asturias), incluyen ejemplares de ambos sexos y distintas edades. Todos ellos habrían fallecido simultáneamente y pertenecerían presumiblemente a una misma comunidad contemporánea de la especie Homo neandertalensis.
http://www.cadenaser.com/sociedad/articulo/mujeres-neandertales-eran-garantes-diversidad-genetica/serpro/20101221csrcsrsoc_2/Tes
Comentarlo, pero es que viéndolos podemos sospechar que las neadertalas se iban por temor a la porra buscando nuevas "experiencias genéticas" que les ayudaran a preservar la especie, sobre todo si tales encuentros se producían en la cueva de El Sidrón. Muy listas, con la evolución ahora lo que buscan ya no es tanto el "material genético" sino los prolegómenos que resultan más divertidos.
Interesante estudio. Algunos podían imitar a los neandertales y cambiar de domicilio en busca de nuevos genes. ¡A ver si suena la flauta!...
ResponderEliminarHome, estimat Don, no n'hi ha per a tant! El senyor Agustí ho ha fet mal, però d'ahí a expatriar-lo!!!
ResponderEliminarBon nadal i que ens toque la Grossa!!!
Precisament no em referia al Sr.Agustí, si no a alguns de què es dediquen a fer la punyeta
ResponderEliminarCreo que Llomlarg ya sabía a que se refería. Entre las virtudes que via genética, seguramente le donó su abuela no está la de captar las ironías, pero, seguramente, hay otras de lo más práctico. A ver si en el 2011, nos obsequia con ellas!!!
ResponderEliminarGracias amigo Gonzalo, pero precisamente mi abuela tenía un sentido irónico difícil de igualar. Veo que a sido usted el que no ha captado mi irónia. Lo siento.
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